Una chica da una lección de positivismo con su cambio físico tras no poder abrocharse el vestido tres años después
Lucy Litman es una instagramer que centra la mayoría de las publicaciones de su perfil en los colores Pantone. Sin embargo, Lucy se ha hecho viral por publicar una foto con la cremallera de un vestido a medio subir junto a un mensaje con espíritu body positive, algo muy de moda en las redes sociales. Lucy sabe que todos tenemos días malos en los que el espejo no es nuestro amigo y por ello manda este mensaje tan importante.
Confiese que ese vestido es una talla 36 y solía ser su favorito, pero actualmente no le abrocha. Sin embargo, no hay que dramatizar por ello. Lucy prefiere aprovechar la ocasión para enviar un mensaje positivo que pueda ayudar a sus seguidores, ya que ha conseguido que su peso deje de dirigir su vida tras pasar por una época en la que ha sufrido trastornos alimenticios.
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«Reflexiones de limpieza de armario: aquí tenéis una foto mía con el que era mi vestido favorito hace tres años. Es una talla 2 y la cremallera no está ni cerca de cerrar en este momento. Últimamente, he estado pensando mucho sobre mi imagen corporal y mi salud, después de que un ‘amigo’ me dijera que me había dejado ir y que debería dejar de comer tanto pan,» escribía en la publicación.
«Realmente, no hablo demasiado sobre esto (y nunca públicamente), pero he luchado contra un desorden alimenticio en el instituto y la universidad y he estado entrando y saliendo de diferentes terapias y centros. Solía pesarme cinco veces al día y el número que veía dictaba mi felicidad y las actividades que me ‘permitía’ hacer a mí misma,» continuaba.
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«Esta restricción a mi propia felicidad y a mi vida acabó con muchas amistades y relaciones, porque me aislaba en casa para no tener comida alrededor,» confesaba Lucy, haciendo referencia a una mala época de su vida.
«Muchas cosas del trabajo que comparto aquí están inspiradas por esa experiencia (la comida no siempre fue algo feliz para mí y, para muchos amigos y familia, la comida sigue sin ser algo feliz), así que espero mostrar una parte más juguetona de lo que comemos y hacer a la gente pensar en colores, formas y texturas en lugar de en calorías o cuánto ejercicio tendremos que hacer para quemarlo,» añade.
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«Estoy feliz de decir que ahora tengo la relación más sana con la comida que he tenido en toda mi vida, pero, a todos los que aún estáis luchando, que sepáis que sois más que un número y que tener un ‘thigh gap’ es irrelevante (y físicamente imposible para la estructura ósea de alguna gente), pero lo más importante de todo es que no estáis solos y de que sois amados,» finaliza.
La publicación ha alcanzado 2.900 me gusta y más de 286 comentarios en los que los internautas felicitan a la instagramer por ese maravilloso mensaje.